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"No por ser muchos descubriréis la verdad, ni ahogaréis la razón porque gritéis unidos"

Rabindranath Tagore

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Iñaki Urdangarín. Duques sin fronteras.

De un tiempo a esta parte, tengo yo la sensación de que los duques consortes están muy en boga ¿no te parece? Y un poco maltratados por la prensa. Me dan ganas de montar algo así como una Ong tipo: “Duques sin fronteras”, “Adopte usted un duque”, “Ponga un duque en su vida”… no sé, tengo que pensar en ello. Pero el duque del que hablo hoy necesita de forma urgente mucha ayuda, pues su reputación se encuentra en estos momentos en caída libre, por no hablar de la simpatía que antes le profesaba la plebe. ¡Ay, qué pronto nos encumbran, para luego derribarnos!

Vaya por delante mi mayor respeto por la presunción de inocencia de la que cualquier ser humano debería gozar, sea cual sea la acusación. Pero ya sabemos que eso en España es poco menos que utopía. Urdangarín ha sido juzgado, declarado culpable y sometido al linchamiento público antes de haber sido oficialmente llevado a juicio.

domingo, 4 de diciembre de 2011

La muerte de Gadafi

He preferido dejar que pase un cierto tiempo antes de hablar de este asunto, que me parece lamentable y que creo que revela la verdadera naturaleza de la condición humana cuando se ve despojada de todo elemento civilizador. De verdad que me siento defraudada por lo que he visto. Me explicaré. En el episodio de la muerte de Gadafi hay dos puntos en los que quiero fijar la atención de forma especial. El primero es la actitud de los que han “ajusticiado” al dictador, el segundo la reacción de esa cosa amorfa y cada vez más incomprensible para mí que es el llamado mundo occidental.

Cuando Gadafi era amigo del "mundo occidental"

No voy a hacer el repaso de los últimos días de Gadafi, puesto que los medios de comunicación hicieron el seguimiento oportuno, pero quiero detenerme en el final. Todos hemos visto las terribles imágenes de esa muchedumbre violenta, iracunda, rabiosa, llena de odio. Por no hablar de la bochornosa sodomización de un moribundo. ¡Qué miedo da la humanidad convertida en masa! No sólo me repugna lo que hicieron, sino cómo lo hicieron y, sobre todo, lo mucho que lo disfrutaron.

jueves, 1 de diciembre de 2011

Cambio de gobierno. Oda al trinque

Una vez pasadas las Elecciones Generales, con el resultado previsto, los políticos, los medios de comunicación y los ciudadanos de a pie, hacemos nuestras propias valoraciones; pero cada uno se fija en aquellos aspectos que más le afectan, lógico. No se trata de especular sobre las directrices que va a tomar el próximo ejecutivo, eso ya se verá, además dependerá en gran medida de lo que nos digan los mercados, Merkel, etc. Eso es, más o menos, algo previsible.



Empiezan a aparecer por todas partes quinielas sobre quiénes ocuparán los distintos ministerios, con especial interés en el de Economía, una auténtica patata caliente. También interesa conocer el destino de los componentes del Gobierno saliente. Por supuesto, otro de los puntos de interés está en saber quién será el próximo secretario general del PSOE.

lunes, 28 de noviembre de 2011

Tres. Manuel Hidalgo

Rara vez coincido con el periodista y escritor Manuel Hidalgo, es una persona con la que no logro sintonizar, ni mucho ni poco. Aún así, me gusta su forma de escribir, directa y clara, por eso, siempre que cae en mis manos el periódico el Mundo leo su columna, después de haber devorado con avidez la de Raúl del Pozo, por supuesto, tengo mis prioridades. El día 29 de octubre publicó un artículo titulado “Tres” que me pareció un diagnóstico muy fino y acertado del estado actual de la sociedad española

“Quizás ya sea hora de revisar la nomenclatura de las tres Españas, popularizada por Antonio Machado y palpable en los tiempos de la Guerra Civil. Propongo unificar las dos Españas extremas de entonces en una sola. Ahora, no importaría tanto la adscripción ideológica como la actitud y el carácter. Esa España estaría formada por españoles agresivos, tajantes, excluyentes y dogmáticos, españoles que no ven nada bueno en quien piensa y actúa de manera distinta. Que no ven nada bueno en general, que sólo se ven bien a sí mismos, cargados de razón, soluciones e ideas verdaderas que estarían encantados de imponer a los demás, aunque los vigentes usos democráticos les llevan a disimular ese deseo.

No sabría concretar cuántos españoles de aquí y de allá integran esta España, pero siendo una minoría muy amplia, se deja notar mucho, pues lleva tiempo tratando con estrépito de autodevorarse y de devorar a quienes consideran indecisos o tibios.

jueves, 24 de noviembre de 2011

Veinte años sin Freddie Mercury

Hoy me he levantado melancólica y mustia. Me ha dado por pensar, y eso en mí, suele ser terrible. He recordado la efeméride. Han pasado ya 20 años ¡qué barbaridad! Recuerdo ese día como algo francamente triste. Para mí Freddie Mercury no solo era uno de los mejores cantantes de todos los tiempos, sino una personalidad única, irrepetible. Freddie no se parecía a nadie, solo a sí mismo. Era una amalgama de mil influencias que entremezcladas dieron un resultado prodigioso. Para mí casi era un ser no humano, rozaba la divinidad, pero ya ves, algo tan triste y terrenal como una enfermedad se lo llevó por delante.



Cómo habría evolucionado, musical y personalmente, de haber vivido, es una auténtica incógnita; se abre un infinito abanico de posibilidades si se quiere pensar en ello. Pero estoy segura de que seguiría en primera línea, tal vez en estos años habría tenido que reinventarse varias veces, pero para él eso no constituía ningún problema, muy al contrario, mudaba de piel siempre que quería o lo necesitaba y, aún tan distinto, no dejaba de ser él. No todos los artistas mutan con tanto éxito y sin perder su mismidad.

viernes, 18 de noviembre de 2011

Carta al señor Anguita

No siempre he estado de acuerdo con usted. Cuando estaba en la política activa, había cosas con las que me identificaba y otras con las que no, me resultaba imposible. Me gustaban, eso sí, sus maneras tranquilas y habitualmente correctas. Era agradable oírle, aunque no coincidiese con su criterio en muchos temas, por su forma suave de explicar las cosas, sin gritos, sin exabruptos, sin insultos, sin amenazas apocalípticas. Todo aquello queda muy lejos de lo de hoy.
No milito en ningún partido, nunca lo he hecho, ni siquiera simpatizo con uno en concreto. Me gusta escuchar las declaraciones de los políticos de las distintas tendencias y luego contrastar, con el paso del tiempo, la consistencia de lo que dijeron. Ahora, gracias a internet es muy fácil hacerlo. ¡Qué poquitos se salvan! La desmemoria y la desvergüenza caminan de la mano en el panorama político español.

Una de las cualidades que más valoro en las personas es la coherencia, la armonía entre lo que dicen y lo que hacen. Aquellas personas que viven en consecuencia con lo que predican tienen mi admiración, aunque no comparta sus ideas. Y eso es algo que resulta difícil de encontrar. Muchos de los que se dicen de izquierdas, son un claro ejemplo de incoherencia. No hay más que otear el horizonte público.

lunes, 14 de noviembre de 2011

España, país de pícaros

La corrupción es uno de los males endémicos de este país, pero también lo es la hipocresía. La inmensa mayoría de los españoles se escandaliza llevándose las manos a la cabeza por los casos de políticos que, de vez en cuando, a cuenta gotas y según convenga, destapan algunos periódicos. Por supuesto que son hechos que generan vergüenza e indignación a partes iguales, y que sobre todo dicen muy poco en favor del sistema político que vivimos, que a veces parece fomentar y proteger al pícaro.
Hace no mucho leí un artículo del genial Pérez Reverte, en el XL Semanal, que establecía una inspiradora relación entre el Buscón y la forma de ser del español. Y yo estoy convencida de ello. El pícaro es el prototipo más extendido en este país. El listillo, el que roba, engaña y miente es aplaudido, bien mirado y admirado. Se empieza desde la más tierna infancia, en el colegio. En otros países el que copia en un examen es rechazado por sus compañeros, ven ese acto como una auténtica bajeza, aquí no, al contrario, es el más guay de la clase. Esa es la mentalidad.


Nos indignan los políticos con sus corruptelas y amiguismos, pero como se suele decir, el que esté libre de pecado que tire la primera piedra. A menor escala, el ciudadano de a pie no es mucho mejor que el político ¿No me crees? Te voy a dar algunos ejemplos.
Muchos trabajos profesionales se hacen sin IVA, es algo habitual en las reformas, en servicios tipo fontanería, jardinería, electricidad, informática…

martes, 8 de noviembre de 2011

Otra mentira más... hoy toca en educación

Me había prometido a mí misma no volver a hablar de ellos, de los políticos y esa pantomima falaz denominada campaña electoral. Pero no lo he podido evitar. Me indigna la facilidad con la que mienten, a diario, en todo y a todos, pero más aún me indigna que nadie tenga el valor, la cordura de callar sus bocas. Esta vez ha sido el señor Pérez Rubalcaba que ante mi sorpresa, declara que la educación concertada la creó el PSOE ¡Y se queda tan tranquilo! Y lo peor es que una mentira tan grande no encuentra una respuesta contundente. Lo que digo siempre, tenemos la clase política que nos merecemos.
Hay muchos temas que se me escapan, especialmente en asuntos de economía; me resulta difícil saber si se miente o no, porque son materias resbaladizas, que hacen uso de términos técnicos que no entiendo. Pero que un señor venga a decirme algo que por experiencia propia sé que no es verdad, me llena de indignación y no hace sino confirmar lo que ya sabía de este personaje: que miente y mucho.


Comprendo que mucha gente joven, que ha nacido en la década de los ochenta o posteriores, no lo ha vivido, pero yo ya tengo unos cuantos años y los mandatos del señor Felipe González y compañía me pillaron con edad suficiente para enterarme de las cosas, otro tema es que me interesase. A aquellos que son más jóvenes, les puedo asegurar que yo, nacida a finales de la década de los sesenta, estudié todo lo que era la E.G.B. (Educación General Básica), es decir, los ocho cursos de enseñanza obligatoria por entonces, en un colegio concertado. Sí, concertado.



domingo, 6 de noviembre de 2011

El fin del mundo: el debate del 7 de noviembre

Se acerca el día D, la hora H, el minuto M y el segundo S. Ríete tú del 11 del 11 del 11. El lunes 7 de noviembre se cumplirán todos nuestros sueños, se paralizará el país por completo para asistir a uno de los eventos más esperados de esta nuestra campaña electoral: EL DEBATE. Los dos máximos aspirantes a presidir este país: Alfredo Pérez Rubalcaba y Mariano Rajoy Brey, expondrán ante millones de espectadores sus respectivos programas electorales, debatirán entre ellos sobre los temas más relevantes y, siempre de forma gentil y respetuosa, mostrarán a los votantes sus distintas propuestas para resolver los problemas más acuciantes. Aquellos electores que aún se sientan indecisos, sin duda, una vez que conozcan los programas de ambos candidatos, podrán decantarse con toda seguridad hacia una u otra opción.
Bueno, pues esto es más o menos lo que se nos vende. A estas alturas de la película, ya conocemos cómo son realmente los debates electorales televisivos. En primer lugar se maneja la cifra de 500.000 euros para costear el evento. No está mal, ¡como nos sobra!.

¡A saber de qué hablan!

Sinceramente no sé si lo voy a ver. Me da la sensación de que estos debates televisivos son una absurdez retórica, dudo mucho que una persona indecisa pueda aclarar sus ideas. Tenemos ya muy vistos a los candidatos, en realidad llevamos muchos meses sufriendo esta campaña electoral y las aportaciones tanto de uno como de otro dejan mucho que desear por una sencilla razón, y es que ninguno de los dos dice lo que tiene pensado hacer si gana las elecciones.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Cada deficiente mental con su eufemismo- Daniel Samper Pizano

Desde hace muchos años, en concreto 20, guardo este recorte. En su día me pareció divertido y exagerado, nunca pensé que pudiera llegarse a esos extremos. He de reconocer que el autor, Daniel Samper Pizano, mostró una clarividencia increíble, pero se quedó corto, la fiebre por el eufemismo que nos asola desborda todas las expectativas, tanto de quien escribió este artículo como de servidora, que lo leyó, lo encontró muy lúcido y por eso lo archivó en su carpeta multi-cosas. Comparto contigo este texto como curiosidad, porque la corrección política en el lenguaje (y en el pensamiento) es tan brutal que seguramente hoy este escritor no se habría atrevido a escribir un artículo con este contenido. Sólo hay algo peor que la censura, la autocensura.
“Si algo admiro de la Organización Nacional de Ciegos no son su poder ni la obra social que lleva a cabo. Sino que se llame así, sin tapujos y sin misterios: de Ciegos. Ellos, y los matadores de toros, son unos de los pocos ciudadanos que se han resistido a esa ola ridícula que busca reemplazar con un eufemismo rosado la palabra que sirve ahora y sirvió siempre para designar una situación dolorosa o profesión polémica.
Sean Connery, un famoso ex cabelludo

Cualquiera que se dé a la tarea de leer la prensa, escuchar la radio y ver televisión, se dará cuenta de que en este país han desaparecido las personas con defectos físicos y los oficios elementales. Aquí ya no quedan más ciegos que los de la ONCE: los demás son invidentes o disminuidos visuales. Tampoco hay cojos, mancos ni locos. Los primeros se llaman minusválidos, los segundos discapacitados y los terceros deficientes mentales.


domingo, 30 de octubre de 2011

Carta al señor Rodríguez Zapatero

Señor Presidente, porque aún es usted presidente de mi país. Le escribo esta carta no para reprochar su gestión política, económica, internacional, etc., que motivos tengo de sobra, no. Lo que me gustaría expresar es la total decepción que como persona usted me ha causado. Sí, como persona. Sé que es político y como tal su aspiración máxima es mantenerse a toda costa en el poder; sé que está convencido de ser el mejor estadista que han visto los siglos, sé que piensa que no hemos sabido entender su visión pacifista (!!!???) del mundo. Pero, aunque le parezca increíble, no todos compartimos su forma de ver las cosas, sus ideas y sus conceptos vitales. Yo estoy segura de que ha intentado hacer cosas en beneficio de la sociedad, no lo dudo, aunque habría sido mejor que hubiese gestionado recursos de forma coherente en vez de actuar como si el dinero del estado fuese su monedero particular del que podía disponer a su antojo, sin pensar que no era una bolsa mágica que, a medida que usted sacaba a manos llenas, se rellenaba sola. Pero ese es otro tema.


Me ha decepcionado como persona porque, con sus maneras aparentemente suaves, disfrazadas de ese “buen rollito”, y eso que usted denomina “talante”, que quiero entender que quiere decir buen talante, pero no estoy del todo segura, usted se ha dedicado a enfrentar, soliviantar ánimos, a azuzar fantasmas pasados, ha querido reescribir una historia que no puede cambiarse porque ya está escrita, aunque usted sea incapaz de aceptar su contenido. Porque con esa sonrisa congelada perennemente en su rostro, falta a quien no piensa como usted, condena al que no comparte sus opiniones, y todo ello ¿por qué? ¿por un puñado de votos? ¿por satisfacer su ego?

lunes, 24 de octubre de 2011

¿Quién tiene la culpa de la crisis?

Llevo mucho tiempo oyendo y leyendo comentarios encendidos contra los banqueros y, en menor medida, contra los políticos, como los únicos causantes de la crisis que llevamos sufriendo desde hace unos años. Me parece que la culpabilidad se queda corta. Evidentemente, los bancos tienen mucho que ver con esta situación, por no hablar de los políticos, pero son muy pocas personas las que hacen un ejercicio de sinceridad y reconocen que nosotros, los ciudadanos de a pie, también tenemos nuestra cuota de responsabilidad en esta debacle. O al menos una buena parte de ellos a los que llamaré, para que nos entendamos, los consumistas.
La locura por el consumo desmedido de los últimos años tenía que pasar factura. En defensa de los consumistas diré que es muy difícil sustraerse al asedio constante al que hemos sido sometidos durante todo este tiempo. Nos han vendido la perversa idea de que para ser felices debemos tener cada vez más. A través de las revistas de moda, la televisión, internet… nos han machacado hasta la nausea para que consumamos, imponiéndonos unos modelos tanto de apariencia física como de estilo de vida que son muy difíciles de imitar. Hay que estar a la última, por lo tanto tenemos que comprar ropa, calzado, complementos, etc. y cambiarlos cada temporada, pues la moda nos dice que lo de una temporada no vale para la siguiente. Y, por descontado, todo de marca.


miércoles, 19 de octubre de 2011

Por qué algunos casi no vemos cine español

El cine español siempre parece estar en crisis. La piratería ha hecho un daño considerable, qué duda cabe, pero pienso que debe haber otra serie de factores que influyan en este declive. Se piratea, y mucho, el cine estadounidense y sin embargo no tiene tantos problemas de taquilla como el español. No soy quién para decir por qué otras personas no van a las salas de cine a ver una película española, puedo hablar de mí, que es el caso que mejor conozco. Aunque es verdad que entre mis conocidos hay auténticos fans del cine patrio, lo cierto es que son menor cantidad que los detractores.
Hay un factor muy a tener en cuenta en este rechazo y es el tinte ideológico que, en los últimos años, ha adquirido el cine que se hace en España. Muchos actores y directores han decretado que quien no ve cine español es de derechas. Por ejemplo, Vicente Aranda en el periódico El Público, el 22 de agosto de este año sentenció:”La derecha española se niega a ver cine español”. Como ya habrás adivinado, han establecido una regla por la que ser de izquierdas equivale a ser bueno, ser de derechas equivale a ser malo. Pero de derechas no es el que tiene esta ideología, no, de derechas somos todos aquellos que no pensamos exactamente, milimétricamente como ellos. Y yo ahora me encuentro con que soy de derechas porque no me gusta el cine español. Pues muy bien, ¡viva el reduccionismo!



sábado, 15 de octubre de 2011

La Maldita Guerra Civil (Homenaje a una madre)

A lo largo de nuestra vida, suceden determinados acontecimientos que marcan un antes y después, que forjan nuestro carácter, que cambian la forma de sentir y percibir el mundo y todo lo que nos rodea. Uno de esos momentos lo viví cuando tenía 13 años, concretamente en el verano de 1982. Conocí a una persona que, sin proponérselo, me dio una lección impecable de lo que es el respeto a los demás y la verdadera tolerancia.
Era la bisabuela de una amiga, o más bien una conocida. Para mí, que prácticamente no conocí a ninguno de mis abuelos, me parecía absolutamente fascinante tener una bisabuela. Se trataba de una mujer menuda y muy arrugadita, que vestía completamente de negro y recogía su pelo casi blanco en lo alto de la nuca con un diminuto moño. Ese tipo de señora mayor que ya apenas se ve, pero que en aquella época y en un pueblo como el mío, era de lo más común.

Terrible imagen de la calle del Pez (Madrid) durante la Guerra Civil

Era una persona vitalista y locuaz que nos divertía cantando canciones de su época, relatando anécdotas que reflejaban una forma de vivir que nos parecía increíble para nuestra mentalidad. Demasiados años de diferencia. Un día nos habló de sus hijos mayores. Una de las historias más tristes y dolorosas que yo jamás he oído. Si me permites, me gustaría contártela, como homenaje a ella y a sus hijos, con la esperanza, por lo que veo bastante ingenua, de mostrar un punto de vista distinto a los dos tradicionales de la maldita, la desgraciada Guerra Civil.

viernes, 14 de octubre de 2011

La “Pandi” de la ceja. ¿Un réquiem?

Siempre me ha resultado fascinante esa superioridad moral que se ha arrogado este grupo basándose en no se muy bien qué. Debe ser fascinante tener la razón absoluta siempre ¿no? Me gustaría saber qué se siente. Son personas que viven en una especie de dualidad: por un lado hablan de paz, libertad, tolerancia, respeto… por otro insultan, amenazan y desprecian a todo el que no piensa como ellos.
El doble rasero en este país está a la orden del día. Todavía recuerdo las desafortunadas palabras del actor Federico Luppi delatando un talante absolutamente antidemocrático: “Tenemos la obligación irrenunciable —nos va la vida y el país en esto— de crear un cordón sanitario, para evitar que esta derecha más que ultramontana, cerril, troglodita, casi gótica, se adueñe del pensamiento y el espíritu español”. He aquí una muestra de la característica principal de todo español, que este argentino por lo que veo ha hecho suya, que no es la envidia, sino la intolerancia. El que no piensa como yo, no tiene espacio en la vida pública, tiene que ser aislado, arrinconado, no vaya a ser que otras personas puedan “contagiarse” y pensar igual. Por supuesto, el señor Luppi tiene la razón, y esa derecha que el vilipendia, que repito, es todo aquel que no piensa como él, es la equivocada y debe desaparecer. Una auténtica oda a la democracia y la tolerancia, sí señor.

Casos como este hay muchos, solo hablaré de uno más, porque tampoco es cuestión de dar cuartelillo a la intransigencia:

viernes, 7 de octubre de 2011

La boda de la duquesa

Bueno, pues ya hemos casado a la duquesa. Sí, digo bien: hemos. Porque ha sido prácticamente una cuestión de estado de la que, aún sin quererlo, se nos ha hecho partícipes a todos los españoles.
Si fuese cruel, que creo no serlo, aunque cada vez me estoy volviendo más mala, habría cedido a mi impulso inicial y habría titulado esta entrada: “Geriatric Park” o similar, también, si fuese cruel, haría un amplio y detallado comentario sobre el bailecito que se nos marca la señora y la sal que despliega el recién estrenado consorte, pero no lo haré, no soy cruel, pero lo acabaré siendo, y si fuese cruel, haría un repaso al vestido que luce la contrayente, pero voy a ser caritativa, porque soy anticuada y a mí me educaron en el respeto a los mayores, sólo por eso.

Portada de la revista Yo Dona
(17/9/2011) que se comenta por sí sola

Ni Agencia Moody, ni Trichett, ni Gadafi, ni los millones de parados, ni la corrupción,… nada de nada, aquí lo que verdaderamente nos tenía que quitar el sueño, lo que de verdad importaba es si la duquesa de Alba se salía, como siempre, con la suya o no. Hemos sido testigos y tomado parte de una pataleta ducal, el pulso que una octogenaria millonaria, que se quería casar con un señor funcionario más joven que ella, ha mantenido con sus hijos, este ha sido el tema estrella de los últimos tiempos. Curiosamente, España ha abandonado su habitual división en dos, derecha e izquierda, para dividirse en pro duquesa o cortesanos y anti duquesa o hartos de la señora y sus caprichos.

sábado, 1 de octubre de 2011

Presentación

Escribir un blog nace de la necesidad innata del ser humano de interactuar con los otros. Nunca habíamos tenido tantas posibilidades de comunicación, salvando barreras geográficas y temporales, pero nunca habíamos estado tan físicamente solos. Desde hace tiempo he ido observando cómo cuesta más relacionarse de una forma satisfactoria con la gente. Cada vez tenemos más prisa, menos tiempo, menos ganas y, sobre todo, cada vez estamos más cabreados (si me permites la expresión).
El estado perpetuo de confrontación ideológica en España, a raíz de la crisis se ha radicalizado. Se profundiza en lo que nos separa, no en lo que nos puede unir. Esas ideas de tolerancia, respeto y convivencia pacífica que, en teoría, auspicia la Constitución, son pisoteadas constantemente, en primer lugar por esa masa informe y maligna que es la casta política, después por las personas normales y comunes, que espoleadas por los dirigentes, se revuelven rabiosas contra el que piensa distinto. Expresiones que estaban completamente desterradas del día a día, tipo: “rojo cabrón”, “facha hijo puta” y lindezas de similar calibre ya no se escuchaban, al menos no era lo habitual, pero ahora han vuelto con más fuerza. El lema divide y vencerás en este país siempre ha funcionado y los políticos lo saben, por eso han llevado a la práctica la máxima que tan buenos réditos les ha dado: “deja que se maten entre ellos, mientras sigamos en el poder...”